En cumplimiento del Plan de Acción en el área cultural, el presidente de la República, Laurentino Cortizo Cohen y la ministra de Cultura, Giselle González Villarrué inauguraron este viernes el proyecto de restauración del Castillo Real de San cuyo costo aproximado fue de 4.9 millones de balboas.
El Fuerte San Lorenzo fue declarado por la UNESCO como Patrimonio en peligro en el año 2012, razón por la cual se adoptó la decisión de encarar un proyecto para rescatar y preservar este sitio considerado monumento histórico y que fue uno de los retos del Gabinete Turístico del Gobierno Nacional.
Mediante este proyecto que fue financiado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Gobierno Nacional busca el fortalecimiento de la red nacional de museos y patrimonio histórico.
El proceso de restauración generó, durante unos 30 meses, 150 empleos directos, la mayoría de provenientes de la provincia de Colón y con un componente de mujeres que fueron capacitadas en restauración.
Con la restauración del Fuerte San Lorenzo, se promociona la actividad turística y se obtiene un impacto cultural como lo representa la historia del fuerte San Lorenzo desde la época colonial.
El proyecto incluyó trabajos de conservación en una parte de los muros de la fortaleza dentro de los cuales se encuentran la escarpa de la luneta, la contramuralla del patio de armas y otros sectores.
También se realizaron los estudios, diseño, aprobación y obras de emergencia focalizados y el baluarte norte del hornabeque, en tanto que la fase tres involucró la ejecución de estudios, diseño, aprobación y obras para la habilitación de un museo en tres de las bóvedas de la fortaleza junto con trabajos de construcción de drenajes pluviales en el patio de armas.