El Ministerio de Cultura de Panamá, representado por la ministra María Eugenia Herrera, tuvo una destacada participación en el evento organizado por el Colegio de Arquitectos de Panamá y la Comisión de Patrimonio y Sitios Históricos de la Sociedad Panameña de Ingenieros y Arquitectos (SPIA). Este encuentro congregó a académicos, estudiantes y profesionales, todos unidos por un objetivo común: la conservación y protección del valioso patrimonio cultural panameño.
Bajo el tema central “Conservación y Protección del Patrimonio Cultural de Panamá”, la jornada se posicionó como un espacio clave para el intercambio de conocimientos y experiencias. Entre los proyectos emblemáticos resaltados se encuentran:
• La restauración del antiguo Colegio Abel Bravo, ahora centro de cultura y arte en Colón;
• La puesta en valor del Conjunto Monumental de Panamá Viejo, un símbolo histórico de la nación;
• La restauración del Castillo de San Lorenzo el Real de Chagreas y la Aduana de Portobelo, ambas fortificaciones del Caribe panameño, componentes de la ruta colonial Transistmica; y
• Los avances y resultados en investigaciones arqueológicas, que enriquecen y fortalecen la narrativa histórica y cultural del país.
En su intervención, la ministra de Cultura, María Eugenia Herrera, enfatizó el papel fundamental del patrimonio cultural como motor de identidad y desarrollo. “El patrimonio cultural es la columna vertebral de nuestra identidad como nación y un recurso estratégico para nuestro progreso. Participar en espacios como este reafirma nuestro compromiso de trabajar de la mano con la academia y los profesionales para preservar y promover nuestro legado histórico”, destacó.
La ministra también subrayó la necesidad de implementar un modelo de gestión integral, inclusivo, participativo e innovador, en el que confluyan esfuerzos del sector público y privado.
El evento fue una clara demostración de la importancia de las alianzas estratégicas entre el Gobierno, la academia y los profesionales, promoviendo acciones conjuntas que aseguren la preservación de los sitios históricos como pilares de la memoria colectiva y como activos de alto valor cultural y turístico para Panamá y el mundo.